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jueves, 24 de enero de 2013

La canción más hermosa del mundo

Yo tenía un botón sin ojal, un gusano de seda,
medio par de zapatos de clown y un alma en almoneda,
una Hispano Olivetti con caries, un tren con retraso,
un carné del Atletic, una cara de culo de vaso,

un colegio de pago, un compás, una mesa camilla,
una nuez, o bocado de Adán, menos una costilla,
una bici diabética, un cúmulo, un cirro, un estrato,
un camello del rey Baltasar, una gata sin gato,

mi Annie Hall, mi Gioconda, mi Wendy, las damas primero,
mi Cantinflas, mi Bola de Nieve, mis Tres Mosqueteros,
mi Tintín, mi yo-yo, mi azulete, mi siete de copas,
el zaguán donde te desnudé sin quitarte la ropa.

Mi escondite, mi clave de sol, mi reloj de pulsera,
una lámpara de Alí Babá dentro de una chistera,
no sabía que la primavera duraba un segundo,
yo quería escribir la canción más hermosa del mundo.


Les presento a mi abuelo bastardo, a mi esposa soltera,
al padrino que me apadrinó en la Legión Estranjera,
a mi hermano gemelo patrón de la venta ambulante,
a Simbad el marino que tuvo un sobrino cantante,

al putón de mi prima Carlota y su perro salchicha,
a mi chupa de cota de mallas contra la desdicha,
mariposas que cazan en sueños los niños con granos,
cuando sueñan que abrazan a Venus de Milo sin manos.

Me libré de los tontos por ciento, del cuento del bisnes,
dando clases en una academia de cantos de cisne,
con Simón de Cirene hice un tour por el monte Calvario,
¿qué harías tú si Adelita se fuera con un comisario?

Frente al cabo de poca esperanza arrié mi bandera,
si me pierdo de vista esperadme en la lista de espera,
heredé una botella de ron de un clochard moribundo,
olvidé la lección a la vuelta de un coma profundo.

Nunca supe cantar de un tirón
la canción de las babas del mar, del relámpago en vena,
de las lágrimas para llorar cuando valga la pena,
de la página encinta en el vientre de un bloc trotamundos,
de la gota de tinta en el himno de los iracundos.

Yo quería escribir la canción más hermosa del mundo.

Joaquín Sabina

sábado, 8 de diciembre de 2012

No se romperá

No vine aquí para hacer amigos
pero sabes que siempre puedes contar conmigo.
Dicen de mí que soy un tanto animal,
pero en el fondo soy un sentimental.


Mi familia no son gente normal
de otra época y corte moral.
Que resuelven sus problemas de forma natural.
Para qué discutir, si puedes pelear.


Dame una sonrisa de complicidad,
toda tu vida se detendrá.
Nada será lo mismo, nada será igual,
ya sabes...
Feo, fuerte y formal.


En el calor de la noche,
a plena luz del día. 

Siempre dispuesto para alegrarte el día.
Hombre de bien
a carta cabal,
y como el Duque:
feo, fuerte y formal.


Mi fama me precederá
hasta el infinito y más allá.
Y vive Dios que escrito está:
“Si te doy mi palabra,
no se romperá”.


No vine aquí para hacer amigos
pero sabes que siempre puedes contar conmigo.
Dicen de mí que soy un tanto animal,
pero en el fondo soy un sentimental.


Dame una sonrisa de complicidad
y toda tu vida se detendrá.
Nada será lo mismo, nada será igual,
ya sabes...
Feo, fuerte y formal.


En el calor de la noche,
a plena luz del día. 

Siempre dispuesto para alegrarte el día.
Hombre de bien
a carta cabal,
y como el Duque:
feo, fuerte y formal. 

Loquillo

jueves, 6 de diciembre de 2012

La palabra

"La palabra es el motor del pensamiento."
Lo dice todo el mundo, pero creo que viene de Lev Vygotski


Con la palabra el ser se piensa a sí mismo.
Cuando la palabra se hace diálogo, la idea se hace concepto.
Así el ser conoce a otros seres: los padres, los hijos, los hermanos.

Si con las palabras construimos nuestra razón, y la música educa nuestras emociones, las canciones con determinantes en la formación de las personas.