La consecuencia natural de diseñar máquinas autoreplicantes para para servir a la humanidad es que olviden sus fines y se sirvan sólo a sí mismas.
Aceptando la teoría de la evolución, cualquier ser capaz de reproducirse está sujeto a posibles mutaciones: Hay múltiples causas, pero principalmente errores en la copia del código y radiaciones sobre el soporte físico del mismo hacen que, en algún momento, aparezcan descendientes no idénticos a sus antepasados: biodiversidad.
Entonces entra en juego la selección natural: ¿Qué variedades serán las más abundantes? En el primer momento, las que más y mejor consigan reproducirse (estando bien adaptadas para sobrevivir el tiempo suficiente para ello). En segundo lugar, los descendientes deben seguir adaptándose al medio -que puede cambiar- igual o mejor que sus progenitores. Prolíficas y adaptables.
En el caso de máquinas diseñadas con el objetivo de liberar al hombre de cierta tarea y dotadas de la capacidad de fabricar hijas idénticas, en el ciclo reproductivo se producirán, con cierta probabilidd, errores de copia, resultando máquinas mutantes. De entre todas las mutaciones posibles, una puede ser olvidar su objetivo primario (la tarea) o subordinarlo a su objetivo seacundario: replicarse. Tal mutación haría a la máquina destinar más recursos a la reproducción y menos a la tarea, reproduciéndose más y mejor, tomando ventaja frente a otras variedades en la selección natural.
Si no se controla la población de máquinas -y frente a eso una buena mutación sería aprender a rebelarse-, el resultado de esta deriva será la expansión de máquinas asilvestradas, cuyo "sentido de la vida" será el mismo que el de todos los seres vivos que llamamos salvajes o silvestres (es decir, los no domesticados): no producir, sino reproducirse. No trabajar, sino vivir.
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sábado, 8 de agosto de 2015
Máquinas asilvestradas
lunes, 21 de julio de 2014
Ensalada de mitos
Eru dio a los hombres el don de la libertad.
Pero los dioses temieron que los hombres encontraran el tesoro de la felicidad, que otorgaba protección ante las adversidades.
Escondieron el tesoro donde fuera más difícil de hallar: En el interior de cada persona humana.
Filósofos y profetas han predicado sabias palabras sobre el camino a la felicidad.
Cada persona tendrá la libertad como arma, y cada pueblo la igualdad como principio de justicia.
La palabra será el camino al paraíso de la fraternidad.
Y por fin los mansos habitarán la Tierra.
La contemplación de la justicia absoluta y el caos total es placer exclusivo de Dios.
Cuando cese la tormenta, también nosotros entraremos en las ciudades espléndidas.
Pero los dioses temieron que los hombres encontraran el tesoro de la felicidad, que otorgaba protección ante las adversidades.
Escondieron el tesoro donde fuera más difícil de hallar: En el interior de cada persona humana.
Filósofos y profetas han predicado sabias palabras sobre el camino a la felicidad.
Cada persona tendrá la libertad como arma, y cada pueblo la igualdad como principio de justicia.
La palabra será el camino al paraíso de la fraternidad.
Y por fin los mansos habitarán la Tierra.
La contemplación de la justicia absoluta y el caos total es placer exclusivo de Dios.
Cuando cese la tormenta, también nosotros entraremos en las ciudades espléndidas.
domingo, 2 de marzo de 2014
La escalera
Estoy subiendo por la escalera de los vientos, escalando por la hélice escarpada y volátil hecha de anhelos de personas, gente a quien no conozco que debió de pensar o desear algo alguna vez.
A mi alrededor caen objetos fugaces, como arrojados desde la cumbre imaginaria de esta torre interminable.
Arriba, en la distancia, y muy abajo, otra gente sube por la misma escalera.
Todos suben, no he visto a nadie bajar.
A mi alrededor caen objetos fugaces, como arrojados desde la cumbre imaginaria de esta torre interminable.
Arriba, en la distancia, y muy abajo, otra gente sube por la misma escalera.
Todos suben, no he visto a nadie bajar.
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Caminos
Desde el ultramundo, saludos.
Promisorios caminos de rutas se nos abren.
La regencia de los caminos no compete si no a las laderas y a las olas.
Promisorios caminos de rutas se nos abren.
La regencia de los caminos no compete si no a las laderas y a las olas.
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domingo, 19 de mayo de 2013
La escalera
Estoy subiendo por la escalera de los vientos,
escalando por la hélice escarpada y volátil hecha de anhelos de personas,
gente a quien no conozco que debió de pensar o desear algo alguna vez.
A mi alrededor caen objetos fugaces, como arrojados desde la cumbre imaginaria de esta torre interminable.
Arriba, en la distancia, y muy abajo, otra gente sube por la misma escalera.
Todos suben, no he visto a nadie bajar.
escalando por la hélice escarpada y volátil hecha de anhelos de personas,
gente a quien no conozco que debió de pensar o desear algo alguna vez.
A mi alrededor caen objetos fugaces, como arrojados desde la cumbre imaginaria de esta torre interminable.
Arriba, en la distancia, y muy abajo, otra gente sube por la misma escalera.
Todos suben, no he visto a nadie bajar.
viernes, 19 de abril de 2013
El hombre de hielo
El hombre de fuego se convirtió al envejecer en un hombre de
hielo.
El gélido tirano no sólo había cambiado de nombre, también
de conducta, incluso costaba reconocerlo físicamente. Pero conservaba ese gran
poder que lo había hecho famoso como sembrador de mundos y destructor de
ciudades.
El poder puede desaparecer sin extinguirse, dejar de
manifestarse, o cambiar de uso. El poder trasformador que este hombre había
desarrollado en su juventud hasta el punto de extender el miedo animal entre
sus enemigos y la devoción mística entre sus seguidores se había ido
invirtiendo en preservar lo creado, mantener su obra, conservar la luz de su
antorcha. Hasta el punto de que su llamarada se congeló, y lo que había sido un
torrente de lava quedó detenido en coladas de roca fría.
Nunca dudó seriamente de sí mismo. A pesar de que ocupaba el
lugar de los señores de hielo a quienes conquistó, siempre tuvo el
convencimiento de que su estallido había sido una liberación para su universo y
que con ella había creado un paisaje mayor y mejor que el precedente. Y aunque
no fuera así, aún tenía otra razón más íntima y definitiva para legitimarse,
pues creía en el derecho de las estrellas como él en expandir su energía, crear
sus mundos y reinar sobre ellos hasta la morir de frío… o devorado por otra
estrella.
miércoles, 27 de marzo de 2013
La arenga
-¿Seguro
que no quieres hacerlo tú mismo? Esto es un acto muy simbólico, casi paternal.
-No es
necesario. A estas alturas el compromiso ya no es conmigo, sino consigo mismos,
con la Flota y la República. Tú mismo lo has visto. Cuando esto acabe, si acaba
bien, los que lo empezamos habremos cumplido nuestra misión con creces,
recogeremos los laureles y nos retiraremos sin causar molestias.
El
mariscal cesó su charla cuando el soldado elegido llegó al puente. Había sido
seleccionado entre los oficiales más comprometidos y motivados, asiduo del
grupo de teatro, el que tenía la mejor voz. El mariscal se había ocupado de
escribir personalmente la arenga que la tropa necesitaba después del fatigoso
viaje y la tensa espera hasta que el enemigo fue divisado. El oficial que en
adelante sería conocido como la Voz y reconocido por ella se acercó al aparato
con aplomo, como en el escenario, pese a que la comunicación sería sólo en
audio para no distraer toda la atención de los pilotos y soldados, que ya
tenían la vista sobre el enemigo distante.
Tras el
tono de conexión, comenzó:
-¡Soldados!
Hablo en nombre del mando de la Flota. Todos habéis recibido las órdenes. Sabéis
por qué estamos aquí: Hemos venido a defender la República contra el mayor enemigo
al que se haya enfrentado.
»El Mariscal nos lo ha enseñado:
Nuestras armas son los huesos de la República. No existen mejores soldados que
nosotros, porque sabemos quiénes somos: Somos la garantía de supervivencia de
un organismo mayor que todos nosotros. Juntos formamos la mayor civilización
conocida, y cada ciudadano confía en cada uno de nosotros para cumplir esa
misión, y las que vendrán.
»Sabéis que no existe mayor honor
que servir en esta Flota luchando por nuestros hermanos, ni mayor gloria que
morir por los camaradas. Si alguna vez fracasamos, persistimos en el objetivo.
Si morimos, nuestros compañeros ocuparán nuestro lugar. Hasta la victoria.
»Luchamos por nuestro mundo.
¡Adelante!
martes, 12 de marzo de 2013
domingo, 3 de marzo de 2013
Belleza II
Hoy he visto la belleza una vez más.
Junto a una montaña de regalos invocamos a Creto, advocación del fuego libre del amor.
De la mano con el origen autodefinido pero irreflexivo de la vida ascenderás hacia la luz.
Tu pecho pintado de sangre de caballo, tu cabeza de sangre y plata.
La sangre, destilado de la luma, y la plata, arte y alquimia de la virtud.
Tu silueta orlada por alas blancas de brillo libertario.
Tu rostro enmarcado en cabellos pardos y grises irradiará voluntad de justicia,
tus brazos sobre la espada advertirán a los cobardes de que la gracia es para quienes respetan la belleza de la vida y saben que su madre es el amor.
Inflada por el fuego te elevarás hacia la santidad, hasta abrazar las regiones de los árboles inmortales.
Junto a una montaña de regalos invocamos a Creto, advocación del fuego libre del amor.
De la mano con el origen autodefinido pero irreflexivo de la vida ascenderás hacia la luz.
Tu pecho pintado de sangre de caballo, tu cabeza de sangre y plata.
La sangre, destilado de la luma, y la plata, arte y alquimia de la virtud.
Tu silueta orlada por alas blancas de brillo libertario.
Tu rostro enmarcado en cabellos pardos y grises irradiará voluntad de justicia,
tus brazos sobre la espada advertirán a los cobardes de que la gracia es para quienes respetan la belleza de la vida y saben que su madre es el amor.
Inflada por el fuego te elevarás hacia la santidad, hasta abrazar las regiones de los árboles inmortales.
viernes, 1 de marzo de 2013
Serena
Temblarás bajo el brillo del cristal.
Tu joven cuerpo vestido de rojo y plata se estremecerá, atravesado por la energía química que se esparce desde el punto en que el cristal toca tu vientre desnudo, esparciéndose por toda tu piel.
Libera tu amor, tu odio, tu angustia, tu esperanza, tu orgullo y tu rencor.
Quédate tú sola, serena.
Tu joven cuerpo vestido de rojo y plata se estremecerá, atravesado por la energía química que se esparce desde el punto en que el cristal toca tu vientre desnudo, esparciéndose por toda tu piel.
Libera tu amor, tu odio, tu angustia, tu esperanza, tu orgullo y tu rencor.
Quédate tú sola, serena.
lunes, 10 de diciembre de 2012
Sueño volador
Me
despierto sobre una sábana blanca en medio de un campo helado. La escarcha cubre
la hirsuta hierba invernal. Pero no tengo frío, acurrucado entre los pliegues
de la manta -¿o era una sábana?-. El Sol se está elevando sobre las peñas
nevadas, y yo noto que la luz me sonríe. He vuelto a ser feliz. He vuelto.
Sin
pensar si hay otras personas en el mundo, canto. Canto para el Sol y la hierba,
pero sobre todo para mí. Me gusta cantar. Mi voz se eleva y yo gano poder y
sabiduría. Veo que mi cuerpo se ilumina, y la sábana pacífica comienza a ser
agitada por un viento espiritual, destilado de la mente humana, energía
alquímica de la Tierra y el Cosmos.
El Sol
se eleva más, y yo seguiré cantando. La sábana se sacude sus anclajes, y del
batir de su fibra mágica comienza a salir música. Toda la música.
El
viento sagrado me envuelve en un remolino de alegría donde mi voz se mezcla con
la de todas las canciones, y me doy cuenta de que estoy muy alto sobre el
suelo.
El
polvo de estrellas que me ilumina está dibujando sobre la sábana figuras de
trazos: son palabras. Y me doy cuenta de que la sábana puede ser infinita si yo
quiero. Y al leer las palabras he aprendido que puedo conducir mi sábana.
Y
conduzco flotando sobre los valles nevados, donde los antiguos edificaron
ciudades de piedra. Bajo mi mirada los vetustos pilares vibran en tono menor.
Sus acordes sublimes recogen toda la música que me envuelve para componer una
sinfonía caótica.
Es un
mensaje único y total de energía tan reveladora que la sábana, que ahora es
casi una nube iridiscente a mi alrededor, crepita y se descompone en una
bandada inabarcable de páginas. Son páginas blancas con grafos negros, y negras
con grafos rojos.
Y me
doy cuenta de que floto en el aire sin sábana, porque un par de alas grises me
sostienen sobre la corriente de música. Y me siento libre. Muy libre.
Libérrimo. Estoy eufórico y lo canto a todo pulmón, hasta hacerme dueño de la
sinfonía, o ella de mí.
Surco a
gran velocidad el mar de páginas y espuma musical, bruma de imagen y sonido. Podría
reconocer cada obra imaginada por un alma humana, focos organoeléctricos
animados por la chispa divina. En mi estela de turbulencias, las nubes de engendros
incorpóreos toman forma en la figura de un pájaro blanco, tan pesado que sólo
la energía espiritual de sus elementos lo sostiene en vuelo sobre el mundo.
Y me
doy cuenta, al posarme a lomos del pájaro, de que no podré seguir viviendo ni
mantener mi sueño si no regreso al mundo. Pronto surge de entre las nubes
oníricas una cumbre rocosa, sustancia misma de la realidad, y el pájaro vuela
hacia ella como atraído por el magnetismo profundo de una existencia plena.
Cuando
el pájaro posa sus zarpas, agudas como el ingenio, sobre la vetusta roca,
ordeno al viento que barra con melodía urgente el caos imaginario que nubla la
vista. La luz prístina del Sol descubre afiladas laderas y extensos valles por
los que la energía se derrama en arroyos cantarines. El pájaro agita sus alas
generosas sobre el país, haciendo nevar un polvo finísimo, agudo y poderoso
bajo el cielo despejado.
Y me
doy cuenta de que mi propósito era poder realizar esta siembra de estrellas y
ver alzarse esos árboles jubilosos que ya brotan y crecen y se abrazan para
formar un hermoso bosque vibrante de alegría, que se trasforma en pradera
florida al subir hacia la cumbre.
El
pájaro, al recibir de vuelta la música convertida en suave brisa perfumada,
eleva la cabeza al cielo y pronuncia por primera vez un canto alegre y sincero
de simple y total felicidad.
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domingo, 9 de diciembre de 2012
Teravún
Tu mirada grita tierra
Tus plumas mueven el viento boscoso
que alimenta los azotes de las ciudades terrestres,
como la espuma de tu cantar
sazona las avenidas costeras.
Gracias al devenir de tus flujos
se hidratan las almas de los seres
y se airean e inflaman
las mentes de la gente.
Gente que no te conoce.
Unos no saben de ti, nunca han sabido.
Otros dejaron de encontrarte y te han olvidado, ya nunca te recibirán.
Otros muchos te sienten lejos,
beben tus flujos con desconfianza y avaricia,
sin atreverse a cruzar tu mirada ígnea y juzgadora,
sin dar gracias.
Los hay que notan tus ánimos crispados,
tus plumas erizadas y tus reflejos ásperos,
Sólo los mas valientes enfrentan tu tremenda figura
para preguntarte con temor por qué
a través de tus ojos irritados
oyen gritar a la tierra.
Tus plumas mueven el viento boscoso
que alimenta los azotes de las ciudades terrestres,
como la espuma de tu cantar
sazona las avenidas costeras.
Gracias al devenir de tus flujos
se hidratan las almas de los seres
y se airean e inflaman
las mentes de la gente.
Gente que no te conoce.
Unos no saben de ti, nunca han sabido.
Otros dejaron de encontrarte y te han olvidado, ya nunca te recibirán.
Otros muchos te sienten lejos,
beben tus flujos con desconfianza y avaricia,
sin atreverse a cruzar tu mirada ígnea y juzgadora,
sin dar gracias.
Los hay que notan tus ánimos crispados,
tus plumas erizadas y tus reflejos ásperos,
Sólo los mas valientes enfrentan tu tremenda figura
para preguntarte con temor por qué
a través de tus ojos irritados
oyen gritar a la tierra.
lunes, 3 de diciembre de 2012
Reina
Eres la reina de mi enfermedad, torrente de mis pasiones, diosa de mi soledad.
Te buscaré para devolverte la flor que tú sembraste en mi pensamiento.
Y cuando te encuentre, en una tarde de invierno, quizá no me reconozcas, porque habré perdido mis ojos por los caminos de tu imaginación.
Te buscaré para devolverte la flor que tú sembraste en mi pensamiento.
Y cuando te encuentre, en una tarde de invierno, quizá no me reconozcas, porque habré perdido mis ojos por los caminos de tu imaginación.
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sábado, 1 de diciembre de 2012
Revolución
La honradez y la honestidad son revolucionarias en nuestro tiempo.
Pero la verdadera revolución es atreverse a amar.
Pero la verdadera revolución es atreverse a amar.
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miércoles, 28 de noviembre de 2012
El mar
El mar cubre el misterio de aquello que nos une.
Todas las tierras son una bajo el mar.
El mar es el camino.
Todas las tierras son una bajo el mar.
El mar es el camino.
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jueves, 22 de noviembre de 2012
Sacrificio
Cada vez que veas morir a un hombre bueno, cada vez que una mujer valiente perezca bajo la violencia de los cobardes o los estúpidos,
entonces en este mismo mundo estará naciendo una persona que ocupará su lugar entre las filas de los santos salvadores.
Porque el amor nunca muere, cada vez que se mata a un profeta de la libertad, nace otro apóstol de la fraternidad.
entonces en este mismo mundo estará naciendo una persona que ocupará su lugar entre las filas de los santos salvadores.
Porque el amor nunca muere, cada vez que se mata a un profeta de la libertad, nace otro apóstol de la fraternidad.
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miércoles, 21 de noviembre de 2012
Belleza
Conozco la belleza.
La veo cada día brotar del Sol, la veo flotar sobre los árboles, gotear sobre las hojas caídas.
La oigo derramarse por los torrentes, la escucho crepitar y salpicar contra los acantilados.
Me saluda cada día en los rostros de los seres con los que me encuentro.
Está en las rocas y también en los suelos. Está en los árboles y en la hierba. En los gatos e incluso en los peces.
Siento la belleza por todos los sentidos, en todas las mujeres, y hasta en los hombres.
Cuando más sensible está el sentido de la belleza, te das cuenta de que en otros momentos no la estabas disfrutando.
La veo cada día brotar del Sol, la veo flotar sobre los árboles, gotear sobre las hojas caídas.
La oigo derramarse por los torrentes, la escucho crepitar y salpicar contra los acantilados.
Me saluda cada día en los rostros de los seres con los que me encuentro.
Está en las rocas y también en los suelos. Está en los árboles y en la hierba. En los gatos e incluso en los peces.
Siento la belleza por todos los sentidos, en todas las mujeres, y hasta en los hombres.
Cuando más sensible está el sentido de la belleza, te das cuenta de que en otros momentos no la estabas disfrutando.
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sábado, 17 de noviembre de 2012
Memoria
Hoy fuimos héroes.
Las rayas negras que cruzan nuestro cuaderno marcan las horas que no fueron perdidas.
Me avergüenzo del aspa burlona de los días en blanco, horas rayadas esperando el suceso equivocado.
Pero "nada se olvida. Todo se guarda en paquetitos de memoria. Todo es historia."
Prometo que nunca olvidaré. Siempre recordaré.
Las rayas negras que cruzan nuestro cuaderno marcan las horas que no fueron perdidas.
Me avergüenzo del aspa burlona de los días en blanco, horas rayadas esperando el suceso equivocado.
Pero "nada se olvida. Todo se guarda en paquetitos de memoria. Todo es historia."
Prometo que nunca olvidaré. Siempre recordaré.
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viernes, 16 de noviembre de 2012
Música
"La combinación lineal de las cosas posibles reacciona en una sinergia química de músicas."
La música es el camino a la luz.
La música es el camino de la verdad.
La música es verdad.
La música es el medio y el canal de todos los sentimientos y emociones humanas y divinas.
Es la ira y el miedo, el descanso y el amor.
Es la entrada y la salida de la luz y de la oscuridad.
Es el sonido de los números y la lengua de los ángeles.
Díselo con música.
La música es el camino a la luz.
La música es el camino de la verdad.
La música es verdad.
La música es el medio y el canal de todos los sentimientos y emociones humanas y divinas.
Es la ira y el miedo, el descanso y el amor.
Es la entrada y la salida de la luz y de la oscuridad.
Es el sonido de los números y la lengua de los ángeles.
Díselo con música.
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jueves, 15 de noviembre de 2012
Mi casa
Un piano sonando junto al fuego.
Un acordeón templando la niebla de una tarde prematura.
Una radio difundiendo rayos electrónicos al mar.
Una marea de ruido blanco acosando un acantilado que se cree imperturbable.
Un río milenario haciendo hablar al valle.
Un ritmo arcano recorriendo los caminos del monte.
Una voz multimestiza de mujer uniendo todas las orillas del mar.
Y el polvo dorado sobre la estantería.
Y el brillo plateado de los discos.
Y el filo diamantino de las pantallas.
Un acordeón templando la niebla de una tarde prematura.
Una radio difundiendo rayos electrónicos al mar.
Una marea de ruido blanco acosando un acantilado que se cree imperturbable.
Un río milenario haciendo hablar al valle.
Un ritmo arcano recorriendo los caminos del monte.
Una voz multimestiza de mujer uniendo todas las orillas del mar.
Y el polvo dorado sobre la estantería.
Y el brillo plateado de los discos.
Y el filo diamantino de las pantallas.
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